Las y los jóvenes necesitan una red relacional que facilite el apoyo en la consecución de sus sueños. Cómo se relacionan tiene un impacto determinante, por lo que el programa realiza un trabajo de autopercepción del estilo relacional en base a cinco actos (pedir, ofrecer, acordar, escuchar y reconocer) que determinan la calidad y la eficacia de las relaciones.